martes, 25 de febrero de 2014

Amb el peu calcules com està l’aigua...

... i tot esta llest per tal que entrem al mar (en este caso al lago). Y tengo documento gráfico, la clase de noveno (15-16 años) es la que hace esta prueba. Al menos en el cole al que (si es posible) irá Nicolás. Todos tienen que aprender a salir del del lago helado usando los pinchitos de marras. No sé si a mis hijos les tocara probarlo un día de estos, pero ¡madre mía!  a mi que no me llamen ni para mirar..
 
 
 

 
 
Que frío sólo de verlo, ¡ays! ¡estos suecos están locos!
 
besitos

miércoles, 19 de febrero de 2014

Siempre nos gustó usar y tirar

O podríamos decir ese maravilloso mundo de la segunda mano. En nuestra familia (como en muchas otras) hay una larga tradición de reciclar-reutilizar muebles y demás enseres, además, cuando tanta gente tiene segunda vivienda, el que va a tirar algo, busca a quien regalárselo y así las cosas van cambiando de mano. Y cuando no, hacemos esos increíbles hallazgos en algún emporio de riqueza (contenedor de basura). El resultado final suele ser una decoración de lo más ecléctica.
Los suecos no son menos aficionados a esto aunque, como la gente se mueve más y es más raro que toda la familia viva cerca, reutilizan de otra manera. Además, tener esas casas tan bien decoradas, pasa por renovar el mobiliario a dos por tres, para eso tienen al Sr. Ikea, "prêt à porter" de los muebles. Todo esto genera un amplio mercado de segunda mano. Hay donde elegir:


- Por un lado están los "loppis" (mercadillos) algunos son fijos y otros son como los que salen en las películas, un vecino que hace limpieza y vende trastos viejos, o un barrio en alguna fiesta. Cerca de casa hay uno en el que trabajan disminuidos físicos y psíquicos, a mis hijos les encanta ir porque hay comics por 1kr!! aunque entenderse con el de la caja se les hace muy difícil (es tetrapléjico, no habla, y maneja la caja con un palito) siempre termina saliendo la encargada (una persona "normal"). Los loppis molan mucho es inevitable no cargar con algo.



- Tambien hay tiendas, en el centro hay un Myrorna,  una tienda con fines benéficos de objetos de segunda mano. En el ecoparque hay contenedores con su nombre. Es nuestra perdición, cada vez que vamos nos llevamos algo, algún macetero, la mesa de la cocina (22€), un mantel antiguo de hilo (nuevecito y precioso), el otro día un cuadro... una perdición.


- Y se lleva la palma el "Blocket", una página de internet donde la gente compra y vende de todo. Hay muebles por 20kr, esto es lo que te cuesta poner un anuncio, si a ti te sirve, vas y le quitas el trasto. Aquí hemos comprado los sofás, que están fenomenal, una cómoda antigua (nos costó 100€), una estantería para la habitación de los chicos... otra perdición. La cómoda se la compramos a un abuelito que vendía todos sus muebles para ir a una residencia, fue muy divertido contactar y conseguir entendernos con él. Cuando vendió finalmente la casa, nos llamó por si estábamos interesados en comprarla,  ¡ojalá hubiéramos podido! Era muy bonita.


 

Bueno, pues no todo es comprar, comprar, comprar... aquí es comprar-vender-comprar-vender.
besitos

domingo, 9 de febrero de 2014

Verde viento, verdes ramas

Nada, que se ha ido la nieve, llevamos una semana de calor que no veas (3-4 grados!!) Y encima se ha puesto a llover. El verde asoma en los campos y no hay nadie patinando en el lago. Así es que nos hemos ido de turismo, a pasar el día a Uppsala. Aquí tenéis unas fotos de la ciudad de Anders Celsius e Ingmar Bergman. 


El puente de hierro. La sonrisita de Ximo es porque casi me voy al agua por hacer la foto, ¡¡ays!!
Almuercito en un ecléctico.
En el mercado municipal, lördagsgodis (chuches de sábado) concepto que idearon los suecos en los años 50 para que los niños no comieran tantas chuches. Aquí, en teoría, se comen sólo los sábados, al menos los niños. 
La catedral desde el paseo junto al río.
En el paseo.
En el río, muchas bicis aparcadas a ambos lados.

Una ciudad pequeñita pero muy bonita. Aun nos queda por visitar el castillo y el museo de arte, no vamos a tener más remedio que volver.  =)

besitos



viernes, 7 de febrero de 2014

La nube gris

 
¡Quince días sin ver el sol! A esto se refiere la gente cuando dicen "våra mörka länder" (nuestra tierra oscura). Estos suecos no tienen punto intermedio, o no sale el sol, o no se va... Esta semana hemos decidido empezar a tomar vitamina D como hacen todos. Al mismo tiempo hemos empezado a mirar las persianas, la primavera se va acercando, y no queremos que entre el sol a las tres de la madrugada. Ya veis, ni contigo, ni sin ti,  s'aclarirem?  

La vitamina D se encarga de fijar el calcio en los huesos, es muy importante tener la suficiente, tanto para los niños en crecimiento, como para evitar la osteoporosis en los adultos. Pero su carencia también se ha relacionado con el deterioro de las facultades mentales, la depresión y el cansancio. Y esto, a corto plazo, nos preocupa más. Se encuentra en los alimentos que comemos, pero mayormente se fabrica en nuestra piel cuando la exponemos al sol. Aquí no hay mucho sol y si dependemos de la dieta, estas serían las cantidades de algunos alimentos que deberíamos ingerir para sustituir a la dosis de vitamina que nos da nuestro sol mediterráneo:

En viendo las alternativas ( un cuarto de kg. de mantequilla, 2 kg. de hígado, 10 kg de ostras!!! ¿serán con cáscara?) casi que nos compramos un botecito de pastillitas que al final salen más baratas. 180 pastillas, a una al día, tenemos para 36 días. Bueno vale, ya sé que bastan 50 gr. de pescado graso, jejeje, y esto explica la tradición del consumo de "sil" (arenques) que hay por aquí. Está muy bueno, pero aun no somos tan suecos como para comerlo a diario.




En fin que ya hay luz cuando salgo de trabajar, ya queda menos para la primavera y ya no vamos a perder más facultades mentales (de las que todavía nos quedan).
besitos




domingo, 2 de febrero de 2014

¡Válgame La Macarena!

¡Están caminando sobre las aguas! Por fin han abierto el circuito del lago, y como no, ya lo hemos estrenado. Hoy +2º, a Nicolás le daba miedo que no se deshelase el lago, y ciertamente algún trocito daba bastante impresión, sobre todo donde el hielo se ve negro, y parece que te deslices sobre el agua y sea una fina capa a punto romperse. Es una pasada, la pista debe tener unos 10 km, y 4-5 metros de ancho, con caminitos que atajan y que son más estrechos. Pasa una máquina que la limpia o la pule, y se patina fenomenal, aunque bueno, hoy había granizadito por encima debido al calor,por lo que se ve, cuando hace más frío se patina mejor. Había bastante gente, y nadie parecía muy preocupado, aunque muchos de ellos llevaban los pinchitos colgados al cuello para, si te caes al agua, poder salir.

Los pinchitos, aun no sé el nombre técnico.
este barco sigue navegando 
en el hotel del lago 
una grieta en el hielo 
el barco-faro desde otro ángulo

Bueno, entre la entrada de Ximo y la mia, ya tenéis todos los detalles del patinaje en el lago. Definitivamente es para verlo.

besitos