lunes, 14 de octubre de 2013

Disfrutando de los últimos días de "calor"

Esta ha sido una semana intensa, no hemos parado.
Mi chica cumplió trece añitos el martes, así es que hemos tenido la primera fiesta de cumple aquí. Primero tuvimos celebración internaútica con multiconferencia, esta vez con Google+, puedes poner dibujos sobre las imágenes, ¡que divertido!  Y luego, salimos a cenar por ahí los cinco.


Además nos llegó una super-caja de cositas de España, con morcillas incluidas (como no!!) Cartas de felicidades y mucha ilusión tanto de los remitentes como de los destinatarios. 

 Mola mucho recibir cosas.

Entre preparar la fiesta , comprar ropa para Alfredo  (tiene un concierto el día 15 y ha de ir uniformado) y las extraescolares de rigor... Uf, uf y uf, no hay tiempo para aburrirse.
Viernes por la noche cenita, en casa de unos amigos.
Sábado, a pesar de no tener mucha vida social, éramos catorce a comer en casa, es lo que tiene ser familia numerosa, sólo con nosotros ya llenamos. Fiestecita de cumple de Mariolita con guirnaldas, globos y tarta, por supuesto, incluidos. Tocó hacer dos turnos. Comimos un guisadito de carne y patatas.
Los fines de semana aprovechamos para comer "de cuchara". A diario cada uno come en un sitio y a medio día no se hace la comida más importante del día, aquí se come poco, pero más veces. Quizás cuando más comen es en el desayuno, no estoy segura. El caso es que nosotros hacemos un horario un tanto extraño, pero vamos adaptándonos. Desayunamos como en casa, en el cole como almuerzo, toman una fruta o poco más, comen a las 11:30, y yo en el trabajo sobre las 12:00. Así es que al llegar del cole, sobre las dos, meriendan (yo también tengo pausa a esa hora).  Se supone que la cena viene alrededor de las seis, pero entonces se irían a judo y a música después de cenar y no creo que sea muy conveniente practicar judo con el estómago lleno, así es que lo que hacemos es merendar (otra vez)  y cuando vuelven de sus extraescolares, cenar. Así tengo la sensación de que me paso el día comiendo. Los fines de semana son pues los días de guisaditos, lentejas, cocido... paella no porque no tenemos.



Tarta de "hora de aventuras" decorada por Mariola, que está hecha una artista.


Domingo comida. Vinieron a casa los mismos amigos que nos enseñaron a pescar. Él tiene dos hermanas de padre de 15 y 8 años, así es que los niños estuvieron jugando estupendamente. Por desgracia las dos niñas se van a vivir a Australia durante seis meses, y ellos es posible que se muden a otra ciudad por motivos de trabajo, así es que no sabemos si esta amistad seguirá, pero como se suele decir "que me quiten lo bailao". De menú hicimos un arrocito al horno, ¡con morcilla! y se lo comieron todo, aunque como son muy educados no sé si en realidad les gustó. Para nosotros estaba buenísimo. Al ver la morcilla Milda preguntó qué era eso negro, sangre, dije yo, y puso una cara!! jajajajaja La idea era hacer una comida española. Espero que realmente les gustase. No obstante había mucha más comida, ya sabéis, ¡todo menos pasar hambre!


timba de poker con las fichas que Nico
se compró en un loppis (rastrillo)


El tiempo ha acompañado muy bien, ha hecho unos días esplendidos, el domingo a medio día 14 graditos, esto casi, casi se siente como calor. A partir de la semana que viene la temperatura ya no va a tener dos cifras... oj! (¡uy!) y esperemos que siga con una sola cifra durante mucho tiempo, porque cuando vuelva a tener dos será con un menos delante  Åjdå!  (¡ay entonces! se lee "oydo" me recuerda a mi abuela que dice muchas veces "odo")

 
besitos

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